Durante una variopinta marcha de menos de un centenar de personas se combinaron diversos reclamos de sectores de la comunidad tigrense de distintas zonas.
Isleños protestando por el ambiente, miembros de los denominados bachilleratos populares reclamando subsidios, docentes opositores de Suteba haciendo planteos gremiales, grupos de vecinos que reclaman por los aumentos de los servicios públicos, sectores vinculados a la empresa El Recreo que explotaba la línea 723, descendientes de pueblos originarios y hasta desalojados por la justicia se unieron para poder organizar una marcha política a pocos días de las elecciones.
Este grupo de vecinos, convocado por diversas agrupaciones de izquierda junto a Acción Comunal (paradójicamente fundada por una persona que tuvo su origen como funcionario en la dictadura) marchó desde la zona de Canal Carupá hasta Cazón y Montes de Oca, en Tigre, donde un vallado preventivo evitó la aproximación al palacio municipal.
La Secretaría de Protección Ciudadana del Municipio de Tigre había anunciado, por medio de un volante de difusión pública, que adoptaría medidas preventivas ante la posibilidad de desmanes teniendo en cuenta tan heterogénea composición de la protesta política que agrupaba desde el vecinalismo conservador de Acción Comunal hasta las organizaciones de izquierda como Teresa Vive, la Corriente Clasista y Combativa y militantes del MST, CI, IEPUP y Opinión Socialista.
No se ha dado a conocer ninguna declaración política de la movilización aunque es evidente la dificultad de emitir una solo que englobe tanta diversidad de reclamos y tan escasa participación para la envergadura de los mismos.
Los movilizados este martes prometieron realizar otra el jueves al mediodía de similares características.
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