Con una actuación implacable Tigre consiguió quedarse con un triunfo de esos importantes. Los goles fueron marcados por Juan Pablo Garat al inicio del primer tiempo y Brian Rodríguez pasadito la mitad del segundo.
os últimos partidos de Tigre en esa cancha no fueron de los mejores. Newell´s con su gente se hace muy fuerte, haciendo de ese reducto en uno casi inexpugnable. Pero en el fútbol Argentino todo puede pasar, más en este torneo tan irregular como este. Y así fue. La historia un día puede cambiar y ese día fue hoy para el Matador
Para este encuentro y luego de varios Ricardo Caruso Lombardi retomó el 4-4-2 y para ello tuvo que acelerar el regreso de Diego Castaño para equilibrar un medio campo, que sin el "pulpo" decayó mucho. Los otros cambios fueron los de Juan Pablo Garat por Damián Leyes que a último momento no pudo ser de la partida y el ingreso de Brian Rodríguez por Leandro Lázzaro.
Newell´s por su parte tuvo que hacer muchos cambios. Varios jugadores que son importantes para el esquema de Roberto Sensini estaban lesionados y/o suspendidos y no pudieron ser de la partida.
En cuanto al partido en sí, con solo ver los primeros minutos, todos nos dábamos cuenta que la noche era propicia para Tigre. Ya del arrancó se notó que el equipo se plantó en cancha con actitud y presencia de equipo. Esta claro que todo se le facilitó por el gol tempranero pero eso también fue mérito de Tigre. Centro perfecto de Brian Rodríguez para el excelente cabezazo de Juan Pablo Garat. 1 a 0 y con el control mental del partido todo se simplificó a la medida que por el lado local todo se agravó. Para colmó de malas Leonel Vangioni cometió una irresponsabilidad y se fue expulsado. Salvo los minutos siguientes en que ante la adversidad todo equipo se levanta, después fue todo del Matador que lo siguió controlando en base a las dificultades propias del elenco rosarino.
En el complemento había que ver cual iba a ser la actitud de Tigre. Una opción era retrasarse para aprovechar la contra y la otra seguir plantado firme en mitad de cancha. Esta última fue la opción. Es más, ni bien iniciado el complemento Jonathan Blanco estuvo muy cerca de poner el segundo pero lo desperdicio. En la medida que pasaba el tiempo, la Lepra se desesperaba y salvo algún remate de larga distancia o un esporádico centro picante no podía arrimar peligro al arco de Daniel Islas. Los de Caruso nunca se desesperaron y se mostraron muy tranquilos a la espera de liquidar el partido. Así fue nomás. Entre Carlos Luna y Mariano Pasini y con la apreciable colaboración del ingresado Juan Quiroga Tigre llegó a liquidar el partido por intermedio de Brian Rodríguez. A partir de allí estuvo todo de más. Solo era para disfrutar de un triunfo que se dan de vez en cuando y que se tiene que paladear al máximo.
Para este encuentro y luego de varios Ricardo Caruso Lombardi retomó el 4-4-2 y para ello tuvo que acelerar el regreso de Diego Castaño para equilibrar un medio campo, que sin el "pulpo" decayó mucho. Los otros cambios fueron los de Juan Pablo Garat por Damián Leyes que a último momento no pudo ser de la partida y el ingreso de Brian Rodríguez por Leandro Lázzaro.
Newell´s por su parte tuvo que hacer muchos cambios. Varios jugadores que son importantes para el esquema de Roberto Sensini estaban lesionados y/o suspendidos y no pudieron ser de la partida.
En cuanto al partido en sí, con solo ver los primeros minutos, todos nos dábamos cuenta que la noche era propicia para Tigre. Ya del arrancó se notó que el equipo se plantó en cancha con actitud y presencia de equipo. Esta claro que todo se le facilitó por el gol tempranero pero eso también fue mérito de Tigre. Centro perfecto de Brian Rodríguez para el excelente cabezazo de Juan Pablo Garat. 1 a 0 y con el control mental del partido todo se simplificó a la medida que por el lado local todo se agravó. Para colmó de malas Leonel Vangioni cometió una irresponsabilidad y se fue expulsado. Salvo los minutos siguientes en que ante la adversidad todo equipo se levanta, después fue todo del Matador que lo siguió controlando en base a las dificultades propias del elenco rosarino.
En el complemento había que ver cual iba a ser la actitud de Tigre. Una opción era retrasarse para aprovechar la contra y la otra seguir plantado firme en mitad de cancha. Esta última fue la opción. Es más, ni bien iniciado el complemento Jonathan Blanco estuvo muy cerca de poner el segundo pero lo desperdicio. En la medida que pasaba el tiempo, la Lepra se desesperaba y salvo algún remate de larga distancia o un esporádico centro picante no podía arrimar peligro al arco de Daniel Islas. Los de Caruso nunca se desesperaron y se mostraron muy tranquilos a la espera de liquidar el partido. Así fue nomás. Entre Carlos Luna y Mariano Pasini y con la apreciable colaboración del ingresado Juan Quiroga Tigre llegó a liquidar el partido por intermedio de Brian Rodríguez. A partir de allí estuvo todo de más. Solo era para disfrutar de un triunfo que se dan de vez en cuando y que se tiene que paladear al máximo.
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